otra vez... calcuta

Desde el terrado del Maria, si apoyo los pies en el muro (antes blanco, ahora florido de musgo verde..) y levanto la mirada, veo los halcones sobrevolando el cielo.
Mas abajo, en los tejados y ventanas, cuervos negros..
Es ultima hora d la tarde, y alla arriba, entre ese cielo medio caido y medio plomizo, asoma la luna lunera, tres cuartos creciente.. tan blanca, q parece pintada..
Ando escribiendo, y se comienza a oir la oracion musulmana de las seis y media. es un canto de voz larga y profunda. Es tb hermoso y calmo. Bonito d escuxar.. suena antiguo
Buscando no se que, vuelvo a mirar hacia arriba, hacia esaas nubes, y ahi siguen los halcones planeando en silencio. Si uno quiere, parece q a ratos, dancen siguiendo ese canto arabe que ahora inunda casi toda la ciudad.

Ando de vuelta en Calcuta..

Solo un poquito mas, solo un poquito.. apenas han sido tres dias. Manyana me voy, despues d un mes en esta ciudad, salimos de nuevo hacia el norte. Rumbo Nepal.

Pienso en este tiempo y en esta ciudad.. y recuerdo a Baricco, asi q creo que hasta aqui, hasta Calcuta,
se puede volver por tierra, en cualquiera de los trenes que hasta aqui llegan..
o se puede volver por barco, navegando el rio Howragh..
o se puede volver por aire, en avion..

aunq creo, q su se vuelve, sobre todo se vuelve por melancolia..

Y si es por melancolia q sea por esa q lleva hasta la sonrisa incierta d Raju.. o hasta las manos d Ghopal, q arropan y bendicen, el surrealista y entranyable Ghopal.. si es por melancolia, q sea por esa exa d barberos callejeros, d terrados con sabanas d colores o de lluvias a mdeia tarde.. melancolia por el olor a sandalo o per el sabor d la comida en los bancos del Tiru.. melancolia por la gente y el bullicio d Sudder, por Govindo, por Lucy y por todos los xavales d daya dan, por las aceras rotas, por las calles por las manyanas, por esa luz extranya o por esas horas sentados viendo pasar el tiempo..

Manyana parto,
se que la exare de menos a Calcuta..

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