Las Cosas de Argentina

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"Me llamo Francisco y soy esquizófrenico. Esquizófrenico esdrújulo"

Realmente, uno nunca sabe. No sabe nada. No sabe quién és, ni que pasa, ni donde le llevarán sus pies.
Por lo menos, yo no lo sé.
Hasta hace poco, creía que iba hacia Calcutta la Bella, India..
.. y al final resultó que llegué a Buenos Aires, Argentina.
Hace un mes.
Y aquí estoy.

"Me llamo Francisco y soy esquizófrenico esdrújulo. Es decir, soy esquizófrenico pero ni grave ni agudo, sino esdrújulo. Vivo cohabitado por los espiritus de los familiares de mis ex-mujeres. Por lo tanto Yo ya no soy mas Yo, sino que soy Nosotros y en ese marco parental, es donde tratamos de avanzar por el abismo, a través de la vía de cruce, suspendidos en el vacío.."
Francisco Amorortu

Francisco fue la primera persona que conocí al llegar a Buenos Aires. Un viejito entrañable. Entrañable y esquizófrenico, eso si. Vive a las afueras de la ciudad, en una casita diminuta, rodeado de bosques enormes. Francisco es escultor y escritor. Artsita. Hace años, le hizo una casa a su amante. Una casa con forma de mujer. Se entra por su sexo y se pueden acariciar sus curvas y sus entrañas. Es magica. Me encantó encontrar a alguien, que como yo, también se sentía habitado por Otros.

Como saber hacía donde andamos?
A veces se me hace difícil saber que es lo que estoy persiguiendo. Y al dudar de ello, creo, acabo por no saber hacia donde me dirijo.
Es como andar a ciegas. Como jugar al escondite con uno mismo.
Lo bueno de ello, es que todo acaba siendo una sorpresa.

"La nota mas difícil de tocar, siempre y en cualquier lugar, es la del silencio" - David.
A David también lo conocí al poco de llegar a esta ciudad. Es amigo de María. Un tipo extraño, músico percusionista de ojos grandes como ensaladeras y con ademanes de italiano del sur. Puro espectaculo. El dia que lo conocí iba a tocar una especie de mantra para un grupo de pseudovidentes.

A veces, lo mejor es dejarse guiar por la intuición.
A veces no.
Yo creo llegué hasta aqui buscando algo que no se lo que es. Algo o alguien que solo anda por mi imaginario emocional.
Por supuesto, no lo encontré.
O ebcontré otra cosa.

Normalmente me cuesta comprender las cosas. Soy bastante lento. En cambio suelo precibir cuando ando en el lugar correcto. O en el incorrecto.
Dejé Buenos Aires.

Me fuí a Mendoza.
A las montañas, al Los Andes

"La política neoliberal es la que ha llevado a este país a la ruina.. Oh! Mirá que mina! Lástima que camine tan rapido. Las mujeres no se dan cuenta que caminando con esas prisas se van dejando el encanto a cada paso.." - Jorge Acanar.
Jorge era un cartonero. Un mendigo de la ciudad de Mendoza. Dormía en la Pza. Independecia y charlabamos un rato cada mañana. De abuelo vasco, sabía muy mucho de politica, de psicologia y de mujeres. Le faltaban la mitad de los dientes.

No se porqué, desde hace algún tiempo, cuando me da por buscar la Calma, echo a andar. A andar hacia arriba.

Allá, en las montañas, hay algo que siempre está en equilibrio.
Imperturbables y majestuosas.
Cuando algo se tamablea, cuando las cosas se tuercen.. a las montañas.
Me fuí al Aconcagua. Techo de América.
En 4 días llegué hasta el campamento de Pza. Francia, a 4100 mtrs.
La pared sur del Aconcagua, la mole helada.
Despues bajé. Hacia frío.

"Si te gusta su sabor.. escúpelo!"
Kuky
Refugiero del San Bernardo. Compañero de buenas charlas, cocinero y andinista. Un maestro. Cada mañana al despertar sonaba "Rebelión del Alma, Revolución de Amor" de Maturano, banda sonora del refugio. Estuve como en casa.

Todo aquello a lo que le damos un valor, nos merece un esfuerzo.

Llegué a Vallecitos para subir El Plata, 6030 mtrs.

No lo conseguí.

Me quedé en los 5285 mtrs.

Un viento tremendo, helado y constante, dijeron hasta aqui. Mis pulmones de fumador, en ciertra manera, le dieron las gracias.

Y en cambio, pocas veces en mi Vida, me he sentido mas contento, mas completo y mas en paz, que cuando llegué hasta esa loma. La sensación fue indescriptible.

"En alta montaña, si querés llegar a la cumbre, debés pisar despacio. Caminar sin hacer ruido. Como si fueses una bailarina"

Silvia

Silvia fue como un ángel caido del cielo. Refugiera y guía, nos visitaba a menudo al San Bernardo. Recuerdo su mano cebando el mate, su voz suave y sus pasos firmes. Aprendí mucho de ella.

A las montañas, como a la Vida, no se les vence.

Ni se les conquista.

Ni se les ganan sus cimas.

Las montañas ya estaban ahi antes de que llegase nadie.. y ahi seguirán. Nosotros apenas fuimos y volvimos. Ellas son invencibles.

Dioses de roca y hielo.

Tan solo nos dejan compartir su eternidad por un rato.

Y de nosotros depende, hacer de ese rato, algo hermoso y eterno.

"Dejáte de meditar y venite al shopping con nosotras"

La Madre de Maria a Maria.

"La mecanica cuántica no niega que una cuchara sopera sea una cuchara sopera. Lo que dice, es que esa cuchara sopera que parece un pedazo de materia inmovil, es algo en movimiento. Esa cuchara está formada por atomos, protones y neutrones que jamás varian su estructura, y eso es lo que le da la apariencia sólida e inamovible a la cuchara, pero en cambio las particulas (los quants) que forman esos atomos, protones y neutrones aparecen y desaparecen millones de veces por segundo. Particulas que llegan del otro lado del universo sustituyen a las particulas de la cuchara, una y otra vez. Constantemente. Se mueven a mas velocidad que la de la luz y Van y vienen del mas allá.. Y quien dice una cuchara, por supuesto, dice un ser humano"

Miro

Maria y Miro, han sido mis anfitriones durante este mes. He vivido en su casa, me he comido su comida y me he bebido su vino. Maria fue mi profesora de cuentos en Barcelona. Miro, su novio, es acordeonista. A sido un gusto convivir y compartir con ellos. Desde su casa, la loca y enorme Buenos Aires, fue algo menos loca y enorme.

Vamos y venimos.

Sin darnos cuenta.

Viajando mas rápido que la luz.

Visitando lugares que ni siquiera sabemos que existen y conociendo lo que no tenemos ni idea de conocer.

Quizás algún dia debamos sentarnos, respirar y observar.

Yo, de momento, mañana vuelvo a Barcelona.

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