08 julio, 2008

Las Cosas de Rendirse

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Rendirnos.. y no hacer nada
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Rendirse.
Claudicar, abandonarse.. morir,
y no hacer nada.

Quizas sea ese el camino.
Porque rendirse es la mayor y la unica victoria possible,
porque llegar al final de todo no significa que vaya a acabar nada.

Rindamonos, pues, para dar el siguiente paso.
Rindamonos ante la evidencia de lo que somos,
ante nosotros mismos, rindamonos y no hagamos nada.

Rendirse para abrazar el Vacio, el Amor, el dolor y la luz,
el Tao, la ausencia y la Gran Calma.

Claudicar para dejar de luchar, para descartar el objetivo,
para abandonar la busqueda y la espera.
Claudicar para volver a caminar en paz.

Abandonarse para poder observar el lento y perfecto paso del tiempo,
para estar atentos,
para disponer de los anyos necesarios para esculpirnos de nuevo a nosotros mismos. Abandonarnos para vernos crecer.

Morirnos para renacer, para estar vivos.
Morir para Ser.

Veo mil caminos y senderos, hermano
y sospecho que todos llevan al mismo lugar.
Caminamos destino a la desconocida belleza de la Nada y el Todo,
destino al inmenso Vacio de la Verdad y el Amor.
Asi, elijamos el camino del viejo amigo Pol,

el que aprendimos de la buena Loles,

el de los habitantes de la Yellow..
el camino de la humildad
y del ser honestos con nosotros mismos.
No mas, pues, no mas..
Trabajemos para vivir en la sencillez y la pequenyez
como los bigaros del “Mayo”, para sentirnos ligeros..
y recordemos la habilidosa debilidad
de los juncos y las canyas
que al paso del viento no dejan de rendirse y abatirse
para renacer erguidos al poco tiempo.

Abandonemonos, no esperemos mas.
Cerremos los ojos,
dejemos todo atras, pertenencias y suenyos
dudas y apegos.
Desterremos nuestros nombres y los lugares por donde habitamos y transitamos,
olvidemos nuestros planes de ir y venir,
del hacer y deshacer de cada dia,
dejemos que el sol nos dore la piel alla donde ahora estemos
o que la lluvia nos banye los pies mientras cantamos “El Rey”.

Esperemos tranquilamente a que los vertices del tiempo
nos acaricien el Alma.. hasta hacernos llorar.

Claudiquemos sin condiciones
Rindamonos ante la Vida.
Seamos aquello que estemos llamados a Ser.

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