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a ver, dejémoslo claro desde un principio.
el hombre borroso soy yo.. y la tiburona martillo es un pez. quiero decir q no es mi ultima amante (aunque ojalá lo hubiese sido, visto como ha ido el asunto..)
la cosa es que llevo un mes que me encuentro y que no m encentro. o para ser mas claros (y sinceros..), llevo un mes que ando bastante perdido.
ha sido llegar a la barcelona ésta de la simetría y del cronómetro y dejar d ver las cosas claras.
me veo pequeñiiiiito.. minusculo. casi, casi ni m veo. y cuando lo hago (como woody allen..) todo lo veo borroso.
tipico caso d crisis existencial d postadolescente inmaduro.. digo yo, vaya.
asi estaban las cosas cuando me enteré d la siguiente noticia.
parece ser q hace poco una hembra de tiburón martillo, quedó preñada y dió a luz a su cría.
hasta ahi, todo bien. otro milagro de la Vida.
todo sin el menor problema.
pero esta vez a la Vida le dió por rizo el rizo, porque lo curioso, asombroso y definitivamente preocupante dl caso, es que la cría cuando nació llevaba el adn completo d la madre.
o dicho d otra forma, la hembra quedó fecundada sin la necesidad d un macho.
se autofecundó, la tia.. con un par (bueno, al contrario, sin el par..)
asi q ahora resulta que no somos nadie.
al menos el hombre, el macho d siempre, el sexo masculino, el del aparato extensible y menguante, ya no es nadie.
ya no pinta nada.
nada d nada..
manda huevos (o ni eso..)
es lo q me faltaba por saber.
a ver ahora como salgo yo d mi crisis d existencial.
(por huevos ya no puedo..)
el árbol ya lo había plantado, el libro lo tengo casi acabado y ahora q me iba a poner con el tema de las criaturas, llega la tiburona martillo de las pelotas y me jode el invento..
no se como voy a salir d esta..
carajo..!
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